La elección del nombre de la Clínica Quiropraxia Raquis construida en Santiago de Chile, se basa en el latín “Rachis” que significa espina o columna vertebral, en alusión a los servicios de quiropráctica que ahí se realizan.
Su diseño arquitectónico buscó optimizar los rincones de almacenamiento y hacer más acogedores los espacios de la recepción y sala de espera.
El piso fue decorado con loseta de gama cementicia y el techo con paneles metálicos para ocultar los equipos de iluminación.
Los nichos interiores fueron recubiertos en cobre, para facilitar la esterilización y manipulación de los instrumentos médicos. Cada vez más lugares como este, responden a sus necesidades de funcionamiento; en este caso, el diseño es sinónimo de relajación y sanación.