Elementos arquitectónicos para la lectura y el conocimiento
La ciudad de Calgary, Canadá es uno de los centros urbanos más importantes del país. Además de su imponente belleza natural con sus montañas y praderas, la ciudad se caracteriza por sus avances tecnológicos que se han aplicado a la arquitectura en algunos de los edificios más conocidos del lugar como la Biblioteca Pública en el corazón de la ciudad.
Entre estas importantes edificaciones se encuentra el reciente proyecto liderado por Snøhetta, el estudio de arquitectura con base en Noruega, cuyo trabajo se ha centrado en mejorar el sentido del entorno, la identidad y la relación con los espacios físicos habitables. La biblioteca pública de Calgary es precisamente eso, un punto de conexión entre los paisajes urbanos y naturales, en conjunto con las personas que habitan el lugar.
Lo más destacado de la construcción es su fachada, la cual juega con la línea del tren que atraviesa el piso de la edificación. La línea de las vías del tren marcan el trazado de la fachada, la cuál tiene triple acristalamiento, compuesta por un patrón modular hexagonal que permite la entrada de luz en los espacios principales y que deja ver el interior. La entrada principal cuenta con un revestimiento de madera que retoma la inspiración generada por las corrientes de aire y el movimiento de las nubes.
Su interior es un espacio cálido y también se encuentra en parte revestido de madera, junto con partes que dejan ver la estructura inacabada de hormigón. Está dividido en seis niveles en los que puedes encontrar espacios de interacción digital, salas de estar, salas de lectura, auditorios y otros espacios que convergen en un punto de privacidad y con la iluminación adecuada para facilitar la lectura de los visitantes.
De esta forma, la Biblioteca Pública de Calgary, se transformó en un proyecto integral que impulsa la cultura del lugar, además de ser un punto turístico