Arquitectura

La arquitectura de los recintos religiosos

Esta temporada es para muchas personas sinónimo de reflexión espiritual y religiosa y para otras significan días de descanso, pero hay muchas cosas más detrás de esto. Una de ellas es la arquitectura de los recintos religiosos, con personalidad y detalles dignos de admirar.

Un ejemplo es el Templo de la Sagrada Familia, en Barcelona, España. La primera piedra se colocó en 1882 y en la actualidad el proyecto sigue activo, se estima que se ha realizado el 70% de la construcción. Se siguen construyendo las torres, que tienen alturas de alrededor de 80 metros, pero la más alta alcanzará los 172 metros de altura. El arquitecto detrás de este proyecto es Antonio Gaudí, el “arquitecto de Dios”. 

Gaudí pensó en este templo como una fusión entre las capillas góticas y bizantinas tradicionales y con la idea de expresar el cristianismo, dando como resultado una construcción de cúpulas, torres y formas geométricas inspiradas en la naturaleza, la luz y el color.

Cada una de las 18 torres está dedicada, siendo la más alta la torre de Jesucristo, seguida de las torres de los evangelios, los libros de la vida, las enseñanzas de Jesús y la de su madre María. Después se encuentran las 12 torres de los apóstoles. Esta idea de verticalidad es lo que Gaudí llamaba al hecho de “elevarse a Dios”. En el interior, la luz juega un papel importante, pues debe ser armoniosa y remitir paz, invitando así a la oración.

Después de la muerte de Gaudí en 1926, sus colaboradores siguieron con el proyecto de la Sagrada Familia, con ayuda de los bocetos y modelos en yeso que Gaudí realizó.