De granero a edificio vanguardista
Foto cortesía ArchDaily
En Copenhagen, Dinamarca, hay una zona industrial fuera de servicio, por lo que se tomó en cuenta para una reforma de sus espacios y volverla parte de la vida diaria de sus habitantes, con parques, departamentos, restaurantes, oficinas, etc.
El centro de todo este perímetro es un silo que se usaba para el almacenamiento de cereales, el cual tiene 17 pisos y ahora es conocido simplemente como “El Silo”, aunque ahora ya no guarda cereales, sino que alberga departamentos y oficinas públicas.
Para hacerlo seguro, los arquitectos designados comenzaron una transformación desde el interior, reforzándolo para que sus cimientos y sus acabados sean seguros, pero preservando su aspecto original, es decir, el estilo industrial que lo caracteriza. Por otra parte, el exterior es el que ha tenido más reformas, pues ha sido revestido en su totalidad para darle una fachada vanguardista.
Esta fachada tiene un aspecto angular, fabricado con acero. Los arquitectos mencionaron que querían respetar su figura y materiales, por lo que solamente le dieron “un nuevo abrigo”, el cual se complementa con los alrededores y con el estilo de zona industrial mejorada.
El Silo cuenta con 38 departamentos que varían de tamaño, desde 106 hasta 401 metros cuadrados y cuentan con bellas vistas de la ciudad. En cuanto a la parte superior del Silo, se encuentra un restaurante que en su mayoría tiene paredes de cristal, gozando así de una vista de 360° de la ciudad y del mar. En la parte baja se encuentra un espacio para eventos.
Así, a una zona en desuso se le encontró mucho potencial por explotar, aunque en un contexto diferente: el urbano.