Construyendo sueños: Explorando la magia de la arquitectura efímera
La fugacidad, lejos de ser algo negativo, puede ofrecer una experiencia única para experimentar, crear y descubrir. Un ejemplo de ello es la arquitectura efímera, una expresión imaginativa y experimental que combina diseño, técnica y arte para dar vida a estructuras absolutamente fascinantes, increíbles y difíciles de realizar de manera convencional, con la particularidad de que tienen una fecha de caducidad.
Con una rica historia que se remonta a muchos siglos atrás, la arquitectura efímera ha sido utilizada en diversos contextos a lo largo del tiempo. Desde el arte antiguo hasta el Imperio Romano, se construían estructuras temporales para celebraciones y eventos especiales. Esta forma de construcción encontró su lugar en eventos teatrales, el Renacimiento y el Barroco, y en la actualidad, ha expandido su alcance a disciplinas como el arte contemporáneo, exposiciones, eventos y publicidad.
Entre los destacados creadores de esta disciplina a lo largo de la historia, se encuentran figuras prominentes. En primer lugar, Shigeru Ban se distingue por su enfoque innovador y sostenible en el campo de la arquitectura. Después está Lorenzo Quirós, un arquitecto del siglo XVIII, reconocido por su labor en arquitectura efímera tradicional, como la ornamentación en la calle Platería de Madrid durante la entrada de Carlos III en 1760. Por último, Javier Peña Ibañez, director español del Festival de Arquitectura y Diseño de Logroño, sobresale por sus intervenciones fugaces y su investigación sobre la relación entre el espacio temporal y la urbe. Es importante señalar que existen otros destacados referentes en este ámbito, pero estos son algunos de los más trascendentales y aclamados.
¿Cuál es el concepto y significado de la arquitectura efímera?
La arquitectura efímera es una fascinante tendencia que fusiona audacia, experimentación y un profundo compromiso con la transformación del espacio público y la interacción social. Al mismo tiempo, se establece una íntima conexión entre la ciudad y su entorno natural, generando un diálogo armonioso entre lo construido y lo orgánico.
Este enfoque arquitectónico se basa en el diseño, el arte y la técnica de construir edificios o estructuras con un periodo de tiempo específico en mente, es decir, con una fecha de inicio y una fecha de finalización predeterminadas. Esta duración puede abarcar desde unos pocos días hasta varios meses, pero no más allá de eso. Es crucial hacer una distinción entre los proyectos diseñados para un uso temporal y aquellos que no fueron concebidos originalmente como efímeros, que si bien algunos pueden caer en la categoría debido a factores como el uso de materiales de baja calidad como yeso o cartón, es importante destacar que su propósito principal no era ser efímeros, sino que se volvieron vulnerables a la demolición debido a errores en la elección de los elementos de construcción.
Estas estructuras se distinguen por emplear materiales de naturaleza ligera y flexible, siendo esta elección fundamental para permitir su desmontaje y reutilización en diferentes ubicaciones o eventos. Además, es imperativo utilizar este tipo de elementos debido a la necesidad de adaptabilidad inherente a este tipo de proyectos, donde los requisitos funcionales y estéticos demandan soluciones complejas que serían difíciles de lograr con otros tipos de componentes.
En el ámbito de las construcciones efímeras en el contexto social, se pueden identificar distintas categorías. En primer lugar, encontramos la Arquitectura efímera tradicional, que abarca construcciones temporales diseñadas específicamente para eventos y celebraciones particulares. Luego, tenemos el nómada, que se refiere a estructuras móviles o temporales capaces de adaptarse a diversos entornos y necesidades. Por otro lado, está la obsolescente, que se caracteriza por ser diseñada con una vida útil limitada o para volverse obsoleta. Por último, encontramos la de emergencia, que se emplea en situaciones de crisis o desastres naturales con el fin de brindar refugio temporal a las personas afectadas.
Esta disciplina ampliamente empleada cuenta con diversas aplicaciones en diversos ámbitos. En eventos y exposiciones, se utiliza para concebir espacios temáticos, stands, pabellones y escenarios efímeros. En lugares comerciales, se emplea para crear espacios temporales, escaparates y tiendas emergentes. En el ámbito de la escenografía y el teatro, se aprovecha para diseñar decorados y estructuras transitorias adaptadas a diversas producciones.
Aunado a lo anterior, igualmente se utilizan en festivales y eventos culturales, donde se emplean para crear instalaciones artísticas, escenarios, áreas de descanso y espacios interactivos. Además, en la arquitectura sostenible y experimental, se utiliza para probar nuevas técnicas constructivas, materiales sostenibles y soluciones innovadoras. Estos enfoques arquitectónicos más eficientes en términos de recursos, energía y tiempo de construcción pueden servir de inspiración e influir en la arquitectura a largo plazo.
Para dejar un poco más claro lo que es la arquitectura efímera, es importante conocer sus principales características:
Efímero: su principal característica es su antes mencionada naturaleza temporal, enfocándose en la construcción de edificios con una fecha de inicio y fin.
Bajo costo: otra de sus grandes características es su bajo costo, tanto en el diseño como en la ejecución del proyecto. Esto se logra utilizando materiales más accesibles en términos de calidad y precio; sin embargo, es importante destacar que esto no implica que las construcciones sean de baja calidad o carezcan de resistencia, ya que estas están cuidadosamente estudiadas y diseñadas para soportar el peso de las personas u otros elementos que estarán en contacto con ellas.
Flexibilidad: esta permite adaptarse fácilmente a los requisitos de distintos espacios y proyectos. Tanto el montaje como el desmontaje se llevan a cabo de manera sencilla, ahorrando tiempo y dinero.
Ligereza: además de su flexibilidad, estas estructuras efímeras se caracterizan por su ligereza, la cual facilita su transporte, montaje y desmontaje.
Amplio alcance: otra ventaja destacada es la versatilidad de uso de estas estructuras, que abarcan desde eventos deportivos y celebraciones políticas hasta su utilización por parte de instituciones televisivas y en la industria cinematográfica.
Forma de expresión artística: esta crea experiencias sensoriales únicas y evocadoras, desafiando convenciones y explorando nuevas formas de comunicar ideas y emociones. A pesar de ser temporales, estas estructuras impactan visualmente, cautivando al espectador con materiales y elementos creativos que generan una conexión emocional.
Incluso, brinda la libertad de experimentar con la interacción entre el espacio, la luz, el sonido y otros elementos, creando un fascinante diálogo entre el entorno y las personas. Su naturaleza temporal añade un sentido de fugacidad que hace que cada instalación sea única e irrepetible.
Complejidad: es un error común pensar que las estructuras efímeras no pueden ser complejas. De hecho, estas pueden ser sumamente elaboradas tanto en su diseño como en su ejecución.
Innovación: la naturaleza económica y desmontable de las estructuras efímeras permite a los diseñadores y arquitectos explorar nuevas técnicas, tecnologías y materiales que están en tendencia en el campo de la arquitectura.
Sostenibilidad: esta puede ser una forma sustentable de construcción debido a varios factores. En primer lugar, al ser temporal, se pueden emplear materiales y recursos de bajo impacto ambiental; esto implica utilizar elementos reciclables, biodegradables o de origen renovable en la medida de lo posible. Además, al ser construcciones temporales, se pueden optimizar los procesos de construcción y desmontaje, reduciendo así la generación de residuos y el consumo de recursos.
En segundo lugar, la arquitectura efímera fomenta la reutilización y el reciclaje. Muchas de estas estructuras se diseñan para poder ser desmontadas y reconstruidas en diferentes ubicaciones o para diferentes eventos. Esto permite maximizar la vida útil de los materiales y minimizar el desperdicio.
¿Tipos de materiales utilizados en la construcción efímera?
La naturaleza de las estructuras efímeras requiere el uso de elementos distintos a los de las construcciones convencionales; es decir, que sean menos costosas y fáciles de montar y desmontar.
Además de su función, al seleccionar los materiales se consideran factores como la estética, la integración con el entorno y la disponibilidad. Estos son algunos de los más utilizados:
Estructuras tubulares: son estructuras ligeras y modulares, generalmente fabricadas con metal como aluminio o acero. Son fácilmente ensamblables y desmontables, lo que facilita su transporte y reconfiguración.
Lonas y textiles: utilizados por su versatilidad y propiedades. Estos materiales permiten la creación de estructuras ligeras, flexibles y fáciles de montar y desmontar; además, ofrecen opciones de personalización en términos de colores, texturas y estampados, brindando un amplio espectro de posibilidades creativas; eso sin mencionar su gran resistencia al clima y su capacidad de ser translúcidos o transparentes.
Madera liviana: la madera, como el contrachapado o el bambú laminado, también se utilizan, debido a su peso ligero y su capacidad de ser fácilmente ensamblada y desmontada.
Paneles de cartón: especialmente el cartón corrugado, se utiliza en algunas construcciones efímeras debido a su resistencia y bajo costo. Estos paneles se pueden ensamblar en diferentes formas y tamaños para crear estructuras temporales, como paredes o divisiones internas.
Policarbonato y acrílico: utilizados para revestir ventanas, techos o elementos decorativos en las construcciones efímeras, ya que son livianos, resistentes; además de permitir la entrada de luz natural.
Materiales reciclados: cada vez, el reciclaje es más importante, y en este tipo de construcción no es la excepción, pues se utilizan materiales reciclados o reutilizados, como palets, tubos de cartón, botellas de plástico, entre otros.
Fachadas y muros flexibles: en la construcción efímera, se utilizan fachadas y muros flexibles que brindan una gran versatilidad al permitir ajustar la configuración y apariencia del espacio de forma adaptable.
Edificaciones efímeras más icónicas:
Serpentine Gallery Pavilion (Londres): es una serie anual de pabellones temporales construidos en los jardines de la Serpentine Gallery en Londres. Cada año se invita a un arquitecto de renombre internacional para diseñar y construir el pabellón. Estas estructuras son exhibidas durante unos meses y luego desmontadas.
Torre Eiffel: esta es una de las obras efímeras más relevantes de la historia. Aunque inicialmente se planeó su demolición después de 20 años, se mantuvo en pie debido a su valor como laboratorio para experimentos científicos y mediciones de precisión.
Pabellón Alemán de Barcelona: es considerado una destacada obra efímera en la historia de la arquitectura. Aunque originalmente fue concebido como un espacio temporal para representar a Alemania en la Exposición Internacional de Barcelona de 1929, su influencia perdura hasta el día de hoy. A pesar de su desmontaje después del evento, ha dejado un impacto duradero en el diseño contemporáneo.
Burning Man Temple (Nevada, Estados Unidos): anualmente en el festival de arte y cultura Burning Man, en el desierto de Nevada, se construye un templo efímero. Diseñado por artistas y arquitectos, este se convierte en un lugar de reflexión, meditación y ceremonia durante el evento.
Ice Hotel (Jukkasjärvi, Suecia): se trata de una construcción que se realiza de forma anual en el pueblo de Jukkasjärvi, en el norte de Suecia. Cada invierno, se utiliza hielo y nieve para crear este hotel único, que incluye habitaciones, salas de estar, un bar y una capilla; es efímero pues, a medida que llega la primavera, este se derrite y desaparece.
La arquitectura efímera es un campo estimulante que fusiona diseño, técnica y arte para concebir estructuras temporales de gran impacto. Este enfoque brinda una valiosa oportunidad tanto para arquitectos emergentes como para empresas del rubro, ya que permite experimentar con nuevos materiales, diseños y métodos constructivos, entre otros aspectos. Además, se caracteriza por impulsar la creatividad sin incurrir en altos costos en comparación con la arquitectura convencional. En definitiva, es un campo que facilita desplegar la imaginación y explorar nuevas posibilidades en el ámbito arquitectónico.