La autopista Costera E39, en Noruega, es un proyecto que busca ensamblar el completo terreno de los fiordos de una forma eficiente y sin obstáculos. La longitud de esta autopista será de más de 1100 kilómetros de autopista común, así como de puentes y túneles, sin dejar de lado los flotantes. Este proyecto se encuentra a cargo de Kjersti Kvalheim Dunham, quien dirige el proyecto en la Administración Pública de Caminos de Noruega.
Para construir este ambicioso proyecto, es necesario conocer la geografía de Noruega, la cual está dominada principalmente por montañas y laderas abruptas, conocidos como fiordos, que se formaron durante el período cuaternario por la formación y desplazamiento de los glaciares. De hecho, en la actualidad los fiordos se encuentran llenos de agua de mar y la mayoría de la población de Noruega vive sobre o alrededor de algún fiordo.
Debido a la complejidad de esta construcción, se ha catalogado como uno de los proyectos de ingeniería y arquitectura más ambiciosos de los últimos tiempos. Resulta importante señalar que es un proyecto en proceso, ya que aún está por completarse en su totalidad, pues el diseño se ha desarrollado por etapas, algunas ya se encuentran terminadas, pero otras están en construcción y otras más todavía son únicamente planos.
Asimismo, es importante mencionar que, entre las ciudades de Trondheim y Kristiansand, donde se realiza el proyecto, hay alrededor de 20 horas de viaje por tierra y conexiones de ferry. Esta problemática podría tener una solución inteligente con la autopista E39, ya que podría reducir ese tiempo a la mitad.
Si bien esta autopista parece ser verdaderamente ya todo un proyecto completo, al cual no se le puede agregar nada más, la autopista también se elevará cuando sea necesario. Esta idea de un túnel rígido flotante resulta poco creíble incluso para el ingeniero más optimista, por ello hay otros planes para sortear los grandes tramos de agua de una forma económica y ecológica.
