El hormigón es un material que ha pasado de ser utilizado sólo en las estructuras a ser parte del mobiliario del mismo proyecto. Este material tiene propiedades impermeables, y eso le da la posibilidad de ser usado tanto en interiores como exteriores.
El hormigón es una mezcla de cemento, arena, agua y grava. Muy básica pero no por eso irrelevante. Si bien su uso está delegado a estructuras, también puede ser usado para otros fines gracias a sus propiedades. Su maleabilidad, durabilidad y resistencia al clima lo hacen el material preferido por muchos arquitectos para muchas aplicaciones, ya sean grandes edificios, hospitales, hoteles hasta casas y pabellones. Tiene una gran consistencia, una buena capacidad de adaptación y un costo muy bajo con respecto a otros materiales.
Una de sus principales características es que resiste demasiado los esfuerzos de compresión. Sin embargo, su resistencia a la tracción y al esfuerzo cortante son muy bajas, por lo que se debe usar en situaciones de tracción y esfuerzo cortante sean bajas.
Es importante que cuando se proyecte un elemento de hormigón armado, se establezcan las dimensiones, la cantidad, los aditivos y la disposición del acero a usar. También se deben calcular las cargas a las que estará sometido para poder determinar lo anterior.
Si se realiza de una manera correcta, el hormigón puede llegar a ser un gran material para usar en tus proyectos.
