El despacho de arquitectura Bates Smart ha construido una torre en Australia que contará con 10 pisos y 45 metros de altura. Lo peculiar de esta gran torre es que se ha construido casi en su totalidad con madera de ingeniería.
El exterior es totalmente de cristal, por lo que se trata de una estructura híbrida de madera laminada encolada, madera laminada cruzada y cristal. El edificio alberga un conjunto de oficinas de 8,000 m2 en total y se busca que su “esqueleto” de madera promueva un ambiente de trabajo cálido y natural. El edificio se ha bautizado con el nombre de “25 King”.
Este increíble proyecto está muy comprometido con el medio ambiente, y más despachos de arquitectura se están sumando a pensar en la sustentabilidad de la arquitectura para el mundo. La construcción se creó en únicamente 15 meses, logró ahorrar el 74% de carbono, 46% de energía y redujo el 20% del peso total en comparación con el concreto. Cada tonelada de cemento crea 900 kg de emisiones de gases de efecto invernadero, pues la ingeniería de la madera actúa como un sumidero de CO2. En conclusión, el edificio 25 King reduce significativamente la huella de carbono de Australia.
Además de su gran diseño, otros beneficio de este proyecto arquitectónico es que al ser de madera genera menos contaminación acústica, proporcionando gran rendimiento térmico. Representa un reto desafiante para arquitectos e ingenieros, pero se pretende incentivar el uso de la madera laminada cruzada o contralaminada (CLT) para proteger al medio ambiente.
